En los dos años de gestión del Gobierno del Presidente Nayib Bukele se han desarrollado acciones concretas para la transformación de la educación en el país, empezando por priorizar la atención de la primera infancia, una deuda histórica que fue ignorada por las anteriores administraciones.
La Primera Dama de la República, Gabriela de Bukele, ha liderado la Política Nacional de Primera Infancia “Crecer Juntos”, que gracias a la capacidad de gestión del Gobierno adquirió el financiamiento del Banco Mundial por un monto de $500 millones, los cuales serán invertidos para dar el salto de calidad para estudiantes y maestros del sector público.
Desde el inicio de la actual gestión la prioridad ha sido la inversión en primera infancia y se ha trabajado de forma articulada con todas las instituciones para solventar las necesidades de la niñez salvadoreña.
Durante este segundo año de gestión se siguió mejorando la calidad de la educación, con aprendizajes de calidad, dignificación y profesionalización de los docentes, la mejora de la infraestructura educativa y un sistema educativo inclusivo, a pesar del impacto de la pandemia del COVID-19.
“Crecer Juntos es un esfuerzo de país, de articular al Gobierno, a la empresa privada, a las organizaciones y a todos los salvadoreños para unirnos con un solo objetivo: mejorar la calidad y el desarrollo de nuestra niñez. Probablemente los logros de este trabajo los veamos dentro de mucho tiempo, pero tenemos la certeza de que estamos cambiando vidas, al mejorar nuestros servicios con calidad, con calidez para una persona, cambiamos a toda una familia”, aseguró la Primera Dama Gabriela de Bukele.
El Gobierno encontró a más del 60 % de los centros educativos con su infraestructura dañada, por lo que inició con la mejora en la infraestructura y, con el proyecto “Mi Nueva Escuela” se continuará invirtiendo para garantizar espacios dignos para la niñez, una muestra del compromiso de la actual administración para mejorar la vida de todos los salvadoreños.
Es así como el Presidente Bukele está decidido a cambiar la educación y a ponerla al servicio del desarrollo integral de los niños y jóvenes, como agentes de cambio para un nuevo país donde la infancia juegue un papel determinante, con mejor infraestructura, atención en salud y enseñanza de calidad en todo nivel.