El fortalecimiento del sistema hospitalario público, en cuanto a infraestructura, equipos, insumos, personal, entre otros rubros, que está desarrollando el Gobierno del Presidente Nayib Bukele permite, a esta fecha, contar con 1,900 camas para pacientes de COVID-19.
“Nosotros tenemos una capacidad bastante alta para poder manejar pacientes de Unidad de Cuidados Intensivos, algo que nunca se había tenido”, destacó el ministro de Salud, Francisco Alabi.
Contar con Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) va más allá de pensar solamente en una instalación física; se requiere de sofisticados equipos médicos, personal altamente capacitado, accesibilidad a medicamentos muy especializados y contar con líneas vitales.
Históricamente el país ha tenido enormes deficiencias para ofrecer a los pacientes la disponibilidad suficiente para atender pacientes en las UCI. Las pasadas administraciones no se interesaron en fortalecer estas áreas en los diferentes centros hospitalarios del país.
El titular de Salud dijo que las pasadas autoridades se veían obligadas en tomar la triste decisión de priorizar los pacientes a trasladar a una cama UCI, mientras el resto se quedaba en lista de espera, ante la escasez de camas que tenían en el sistema.
“Tenemos para atender a pacientes con coronavirus 1,900 camas disponibles. Es evidente que el sistema de salud tiene un desarrollo con el que no se contaba anteriormente”, destacó el ministro de Salud.
El funcionario agregó que cuando la pandemia haya pasado, y los casos de COVID-19 se normalicen, el Hospital El Salvador se convertiría en un centro más para atender a otros pacientes.
“Se va a poder acortar el tiempo de la mora quirúrgica, hay que desarrollar las diferentes áreas. Es un hospital que va a venir a generar facilidad de acceso a la especialidad médica, en el mundo existen mucho de estos complejos”, anunció el ministro Alabi.