Reos elaboran una diversidad de productos en los talleres penitenciarios

Diversos productos son fabricados por los privados de libertad en los talleres de los diferentes centros penales, como resultado del Plan Cero Ocio que impulsa el Gobierno del Presidente Nayib Bukele.

Con esta estrategia las autoridades penitenciarias buscan abrir espacios para dar las herramientas necesarias a los reclusos, las cuales les permita reinsertarse a la sociedad.

Muebles, zapatos, juguetes, pinturas, artesanías, camisetas, entre otros son los productos creados por las manos de los reos que pueden ser adquiridos por la población salvadoreña en la sala de ventas, ubicada en la 19 Calle Poniente, de la colonia Guadalupe, entre 3ª y 5ª Avenida Norte, Edificio Duarte Novoa, de San Salvador, en el local anexo de donde se emiten las solvencias de antecedentes penales.

Todos los productos que se producen en los talleres penitenciarios son de excelente calidad y de diseños de moda. Los internos trabajan todos los días en los talleres de carpintería, zapatería, serigrafía, pintura, elaboración de accesorios de bambú, corte y confección entre otros, donde se esmeran para aprender a elaborar los productos de mayor calidad y volverse personas capaces de obtener un empleo cuando recuperen su libertad.

Además: Construcción de subdelegación de la colonia Escalón ejecutada por reos en fase de confianza, en el marco del Plan Cero Ocio, tiene un avance del 85 %

Además de esos talleres, en los penales se organizan cursos para que aprendan otros oficios como albañilería, fontanería, electricidad, que también les pueda permitirse abrirse camino para lograr trabajar cuando salgan en libertad.

El Plan Cero Ocio también ha permitido que los reos en fase de confianza se incorporen en actividades de beneficio social como construcción de viviendas, sedes policiales, limpieza y ornato de Parques Nacionales, comunidades y playas, así como la organización, traslado y reparto de los paquetes alimentarios que ha entregado el Gobierno del Presidente Bukele como parte del Plan de Emergencia Sanitario (PES) en el contexto de la emergencia por la pandemia de COVID-19.

Además de permitir la autosostenibilidad de los centros penales, con el Plan Cero Ocio, el Gobierno está promoviendo la disciplina laboral en la población reclusa y aportar a las diferentes comunidades con su trabajo, como una forma de resarcir los daños causados a la sociedad.