Decenas de familias que perdieron sus casas a causa de las tormentas registradas este año en El Salvador recibieron viviendas nuevas, dignas y seguras, como parte del compromiso del Gobierno del Presidente de la República, Nayib Bukele, de velar por el bienestar de los salvadoreños, especialmente los que durante décadas han vivido en situación de vulnerabilidad.
Son 252 familias beneficiadas con las nuevas casas, que están ubicadas en Ciudad Marsella, un complejo habitacional privado en el municipio de San Juan Opico, La Libertad. De dicho total, 174 residían en la comunidad Nueva Israel, en San Salvador, cuyas viviendas quedaron inhabitables tras el paso por el país de la tormenta Amanda, a finales de mayo pasado.
Además, otras 78 familias afectadas por el deslave ocurrido el 30 de octubre en la comunidad Los Angelitos II, en el municipio de Nejapa, recibieron hoy las llaves de sus nuevos hogares.
El gobernante recordó que luego de las afectaciones por las lluvias les dijo: “compartimos su dolor, les vamos a ayudar”, promesa que hoy ha sido saldada. “Antes de Navidad les estamos entregando su vivienda digna”, anunció.
“Nuestro país ha sufrido los embates de varias tormentas. En cada una de esas ocasiones les prometimos que como Gobierno les íbamos a ayudar (…) Estas viviendas son suyas, son propias, son dignas y seguras”, enfatizó el mandatario.
Con esta entrega, el Gobierno salvadoreño provee un techo digno a las 252 familias damnificadas, para que cuenten con un lugar seguro y propio para convivir junto a sus seres queridos antes de que finalice 2020.
“Este regalo de Navidad viene de Dios. Los hombres somos utilizados como herramienta para llevar bendición”, sostuvo.
El mandatario recordó que los diputados no están del lado del pueblo, porque han bloqueando la aprobación de la mayoría de fondos que el Gobierno ha solicitado para atender las emergencias que este año han golpeado al país.
El Presidente Bukele dijo que se tenía una donación de $2.2 millones del Gran Ducado de Luxemburgo para estas familias, pero estos fondos aún no han sido aprobados por la Asamblea Legislativa. “Han sido mezquinos”, fustigó a los legisladores en su discurso.
El jefe de Estado explicó que los fondos para poder proveer las viviendas provienen de remanentes en la construcción del Hospital El Salvador. “¿Cuándo en El Salvador se había visto que el remanente de un proyecto se usara para algo así? Los remanentes de los proyectos se iban a los mismos de siempre”, recalcó el Presidente sobre la corrupción de los gobiernos anteriores.
Añadió que en el pasado, los impuestos se los robaban funcionarios que están en la cárcel, que huyeron a Nicaragua, a diferencia de este Gobierno con el cual el pueblo sí ve sus impuestos invertidos.
El mandatario también comunicó a las familias favorecidas que no deben preocuparse por el pago de cuota de mantenimiento, ya que este compromiso también será asumido por el Gobierno.
Los salvadoreños que hoy recibieron las viviendas a estrenar expresaron su gratitud al Presidente Bukele por este beneficio que jamás esperaron obtener. “Nunca me imaginé que una casita me iban a regalar. Estoy agradecida con él (Presidente)”, dijo con alegría Zoila Constanza.
El gobernante recorrió la vivienda de doña Ana Cristina Díaz, de 81 años, quien proviene de la comunidad Nueva Israel y recordó el dolor que le causó perderlo todo en una de las primeras tormentas de la temporada lluviosa.
Las casas están localizadas dentro un complejo privado, donde podrán tener acceso a diferentes áreas de esparcimiento, casa club, senderos ecológicos, jardines, ciclovía, canchas, juegos infantiles, y piscina, entre otros. Cada una cuenta con dos habitaciones, un baño, sala, comedor, cocina, patio, área de servicio y estacionamiento para dos vehículos.
Con esta entrega, el Gobierno del Presidente Bukele reafirma el compromiso de continuar velando por el bienestar y la seguridad de todos los salvadoreños; y es una muestra que en esta gestión las promesas se cumplen y lo que cuenta son las acciones reales, en beneficio de las familias, especialmente aquellas más vulnerables.