Cada día 70,000 paquetes alimentarios son entregados hasta la puerta de la casa a igual número de familias en diferentes poblados del país. A pesar del intento de los partidos en la oposición, por sabotear esta ayuda, el Gobierno continúa beneficiando a millones de pobladores que han sido golpeados por la pandemia de COVID-19 y los estragos de las tormentas del año pasado.
El Gobierno del Presidente Nayib Bukele inició el Programa de Emergencia Sanitaria (PES), a través del que son repartidos los paquetes alimentarios, en mayo de 2020. Este año recién inició la cuarta fase del referido programa de ayuda solidaria.
La distribución de los alimentos a la población es la operación logística de mayor envergadura que el Gobierno mantiene y es apoyada por el personal de diferentes instituciones, incluso reos en fase de confianza.
Algunos de los partidos de la oposición política han pretendido golpear el PES con sus artimañas, sin embargo, no han podido impedir que esos alimentos continúen llegando gratis hasta la mesa de hogares, afectados de sus finanzas familiares a raíz de los daños colaterales provocados por la pandemia y las lluvias.
Las caravanas de camiones con toneladas de alimentos recorren todos los días cada extremo del territorio llevando la comida, incluso a pobladores de islas, una acción solidaria que nunca se había visto de parte de un gobierno.
Los paquetes alimentarios contienen productos de la canasta básica, arroz, frijoles, aceite, harina, leche, pastas, galletas, entre otros, que forman parte de la dieta regular de los salvadoreños.
La población ha sido beneficiada en varias ocasiones con la entrega de los paquetes. Sectores de la sociedad que han sido dañados directamente por la pandemia como los gremios de artistas también son beneficiados con la ayuda.