El ministro de Salud, Francisco Alabi, despachó hoy 30 mil unidades de hidroxicloroquina a los hospitales San Rafael, Saldaña y Amatepec del Instituto Salvadoreño del Seguro Social, y otros que brindan atención a pacientes que dieron positivo a COVID-19.
“Con esto se incrementa el acceso al medicamento que es parte del tratamiento a los pacientes con COVID-19, y que ha demostrado, en diferentes países con experiencia en la enfermedad, sus buenos resultados”, aseguró el ministro Alabi.
Esta distribución forma parte del donativo de 55 mil 800 unidades de hidroxicloroquina que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele recibió de laboratorios Novartis.
Además, a esto se suman 2 millones 2 mil unidades que el Gobierno compró a la República Popular China, las cuales ingresaron ayer a las bodegas de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), en la terminal de carga del Aeropuerto Internacional de El Salvador.
La hidroxicloroquina es utilizada en la atención de pacientes en estado intermedio y crítico, “no solo tenemos pacientes críticos, sino asintomáticos, que su manejo son medidas generales para bajar la temperatura y la tos“, explicó el funcionario.
Además, Alabi dijo que este medicamento tiene efectos secundarios, como cualquier otro, pero que estos riesgos se previenen realizando una evaluación precisa de cada paciente y tomando los exámenes de salud correspondientes, a fin de verificar que no tenga una patología previa para la cual esté contraindicado.
“El Salvador está a la cabeza, actualizando con base a la experiencia científica y los resultados en otros países; tropicalizándolos según las características de nuestros pacientes”, manifestó el ministro.