El Gobierno del Presidente Nayib Bukele logró sanar y fortalecer la relación con los Estados Unidos, luego de que los gobiernos del Fmln prefirieron establecer relaciones con regímenes socialistas. En este contexto, y como ya lo ha mencionado el secretario de Comercio e Inversiones, Miguel Kattán, fue la gestión del Presidente Bukele la que consiguió agilizar la ejecución del proyecto FOMILENIO II en menos de un año.
Sin embargo, en una maniobra con intención electoral, el bloque de partidos de oposición en la Asamblea Legislativa generó una nueva inconsistencia jurídica que impide al país la gestión apropiada del financiamiento, incluyendo el de los programas en ejecución.
En la sesión plenaria del 26 de noviembre, los diputados de la Asamblea Legislativa votaron en favor de modificar los artículos 2 y 12 del decreto 640, que autorizó al Gobierno a recolectar hasta $1,000 millones en préstamos o títulos valores. Con esto, pretendían mover el dinero hacia las transferencias FODES, pensiones de veteranos y el FOMILENIO II.
“Ellos (los diputados) lo que hicieron fue mentirle a FOMILENIO II, porque este fue un invento de ellos de última hora”, dijo el titular del Ministerio de Hacienda (MH), Alejandro Zelaya.
No obstante, todas estas acciones de los diputados carecen de solidez jurídica. “No me consultó a mí ni le consultó a FOMILENIO: desde ahí, hay ruptura de los principios de discusión parlamentaria”, insistió Zelaya.
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Primero, es importante aclarar que la solicitud para distribuir los $354 millones fue retirada por el ministro de Hacienda el 16 de octubre. Por lo tanto, los diputados no tenían las facultades legales para retomar la iniciativa de discusión.
Segundo, el decreto 640 ha sido ejecutado en su totalidad: ya se financiaron los destinos que cubre. Por lo tanto, no se pueden programar más transferencias de recursos sobre la base de ese decreto.
Luego, los diputados aprobaron un dictamen para orientar $50 millones hacia el FOMILENIO II a través del préstamo 5036 del BID. Es decir, la fuente de los fondos ya fue aprobada por los mismos diputados, pero en otro paquete.
Además, estos funcionarios del Legislativo fallaron en seguir el procedimiento establecido para la discusión parlamentaria, como lo señaló el ministro Zelaya. El Ejecutivo es el que tiene las facultades que la ley otorga para distribuir los destinos de los fondos externos. Incluso FOMILENIO II explicó que sus representantes no fueron consultados sobre el origen de los recursos para finalizar el programa.
En resumen, los legisladores unidos en el bloque de oposición han creado un nuevo lío jurídico que busca presionar al Gobierno y sacar beneficio electoral para sus alcaldes.
“Es inaudito que sigan jugando con los convenios internacionales y los compromisos de Estado”, lamentó el ministro de Hacienda. “Para retrasar más y tratar de culpar al Gobierno, hicieron esta jugarreta. Lo que han hecho es inaudito. De verdad, están jugando con la imagen internacional del país”, enfatizó.
El Gobierno ha demostrado a sus socios en la comunidad internacional que sí hay voluntad para trabajar con eficiencia y transparencia, después de varias gestiones gubernamentales que no supieron aprovechar la cooperación en todo su sentido. El Presidente Bukele promoverá que se cumpla con los procesos legales, en respeto a las instituciones y que no resulten afectadas las personas beneficiadas.
