El Gobierno reiteró hoy a la Asamblea Legislativa la urgencia de contar con una normativa para que el Ministerio de Salud pueda tomar medidas sanitarias de combate a la pandemia de COVID-19, que experimenta un acelerado incremento.
Javier Argueta, asesor jurídico de la Presidencia, dijo hoy que es urgente la aprobación del Régimen de Excepción de Derechos Fundamentales Concretos, solicitado ayer por el Gobierno del Presidente Nayib Bukele al poder Legislativo.
A partir de esa normativa, el Ejecutivo podría tomar medidas de control sanitario, mediante la suspensión, por 15 días, de las garantías constitucionales a la libertad de circulación, de reunión y de cambiar o permanecer en el domicilio o residencia.
“La suspensión de la libertad de tránsito es para que las personas se mantengan en sus casas. La proporcionalidad del tiempo es lo que ha pedido el Ministerio de Salud, basado en estudios científicos”, expresó Argueta en una entrevista radial.
Con el marco legal del Régimen de Excepción, el Ministerio de Salud tendría herramientas para declarar zonas específicas sujetas a control sanitario, la implementación de cercos sanitarios y controlar la movilidad de las personas, entre otras potestades que ayudarían a desacelerar la curva del COVID-19.
El país se encuentra en la fase tres de la pandemia(contagio masivo), lo que aumenta el riesgo de colapso hospitalario. Hasta este día, se contabilizan 5,336 casos confirmados, de los cuales 2,094 están activos. De estos, hay 138 pacientes en estado crítico y 288 graves.
“No existe una vacuna; si existiera una vacuna, no necesitáramos una cuarentena. No hay otra medida”, expresó Argueta, quien pidió a las bancadas legislativas que le “respondan al pueblo” y que no le nieguen al Gobierno las herramientas para combatir la enfermedad.
Tras ser despojado el Gobierno de toda herramienta legal, y quedar sin efecto varias medidas sanitarias que había tomado para combatir el COVID-19, los contagios diarios comenzaron a registrar un aumento acelerado, que no ha parado.