El Gobierno del Presidente Nayib Bukele, como parte de los esfuerzos para restituir derechos y atender necesidades históricas, también emprende las acciones necesarias para que las mujeres puedan participar en el sistema financiero y acceder a liquidez.
Las entidades financieras del Gobierno disponen de líneas que se adaptan a las necesidades de este sector de la población. Empresarias, jefas de hogar y todas aquellas que son pilares en sus familias, en todo el territorio, tienen las posibilidades de acceder a créditos.
Un ejemplo es el Fondo Social para la Vivienda (FSV). Durante el período comprendido entre junio de 2019 y marzo de 2021, el Fondo ha otorgado 5,539 créditos a mujeres, a través de las diferentes líneas, por un total de $103.89 millones. Este total representa el 53 % de todos los financiamientos aprobados durante la gestión del Presidente Bukele.
En estos meses, el FSV adaptó su oferta para cubrir a una mayor cantidad de interesados. La respuesta de las trabajadoras indica que se tomaron las decisiones adecuadas. El programa Casa Mujer, por ejemplo, ha colocado ya $33.89 millones entre 1,839 beneficiadas. Esta línea está enfocada en jefas de hogar, madres solteras, divorciadas o viudas con ingresos familiares que no superan los $1,000. Hasta la fecha, esta opción ha generado la mayor cantidad de créditos desembolsados.
El resto del financiamiento está distribuido entre las líneas tradicionales del Fondo y otros paquetes focalizados como Casa Joven y Vivienda Social, entre otros.
También el Banco Hipotecario se ha sumado a estas iniciativas. Esta semana, el BH lanzó su programa Inclusión Mujer, con el que pueden las destinatarias solicitar fondos para consolidar deudas, invertir en sus proyectos o utilizarlos para capital de trabajo. El proceso de escrituración es gratuito y hay flexibilidad para las referencias necesarias.
En este mismo contexto fue también que el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) aprobó $22 millones adicionales para canalizarlos en créditos blandos para mujeres emprendedoras, que podrán solicitar desde $10,000 hasta $1 millón.
Estas acciones, para incluir a más mujeres en el financiamiento, tendrá un impacto positivo en la economía. Entre mayor sea la participación, tanto en el sistema formal como en el mercado laboral, habrá un crecimiento económico más sólido y más familias tendrán mejores condiciones de vida en el corto plazo.