Mientras la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) hace un llamado a un “cese de insultos y ataques”, a través de un comunicado, el Gobierno del Presidente Nayib Bukele recuerda, a la población y a la gremial, que por parte del Órgano Ejecutivo nunca ha cambiado la vocación de diálogo y de construcción de acuerdos, dos temas importantes para lograr solución a la crisis de COVID-19 que vive el país.
Sin embargo, el Gobierno aclara, ante la ANEP y la sociedad, que la Asamblea Legislativa sigue inflexible, seis meses después del inicio de la pandemia del nuevo coronavirus, ya que no han aprobado propuestas como el Régimen de Excepción, superaron el veto al Decreto Legislativo 661 (que tenía serios vicios de inconstitucionalidad) y siguen apostando al desgaste de funcionarios del Órgano Ejecutivo que sí están trabajando a favor de la gente con interpelaciones y citatorios a varias comisiones legislativas.
“Seguimos proponiendo, abiertos al diálogo y a la construcción de acuerdos, a pesar que la Asamblea sigue poniendo obstáculos y dilatando entendimientos, como ha sido a lo largo de toda la pandemia”, dijo esta semana el secretario privado de la Presidencia, Ernesto Castro.
La gremial ha obviado que fue la Asamblea Legislativa y la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) las que invadieron facultades del Órgano Ejecutivo al quitar las herramientas sanitarias al Ministerio de Salud, ente que según la Constitución de la República debe asegurar este derecho a los salvadoreños, así como otras facultades tuteladas por el Código de Salud, que sigue siendo constitucional.
Por último, la gremial hace un llamado al “diálogo y al trabajo juntos”, pero el Gobierno del Presidente Bukele recuerda que ANEP y varias de sus representantes renunciaron, en mayo, al Comité del Fondo de Emergencia, Recuperación y Reconstrucción Económica, instancia de trabajo y entendimiento para enfrentar, en conjunto, el COVID-19.
Sin embargo, el Gobierno de la República hace un llamado a todas las fuerzas que quieren trabajar por el país a unirse al esfuerzo de vencer el COVID-19, una pandemia que debe de mostrar valores como la solidaridad, la empatía y la unidad de todos los salvadoreños.