El Gobierno del Presidente Nayib Bukele está impulsando un proceso de modernización en el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) a todo nivel. Esto pasa por la nivelación, reorganización y reclasificación de plazas, lo cual se traduce en una mejora salarial que imprime una nueva mística de trabajo entre los colaboradores de esa institución.
Esta política impacta directamente en los derechohabientes y se vuelve un círculo virtuoso de modernización y reconocimiento al capital humano que tiene el ISSS, a la par de las medidas para mejorar la infraestructura y los procesos de atención en todos los niveles de esa autónoma, que atiende a cerca de 800,000 trabajadores afiliados.
Asimismo, muchos empleados del ISSS que se han tecnificado y han continuado con sus estudios recibirán una retribución por su esfuerzo, quienes además de enfocarse en la pandemia por COVID-19 no han dejado de atender a pacientes con otro tipo de patologías.
“Hemos llegado a la nivelación salarial incluso tomando en cuenta ajustes según su responsabilidad. No se excluirá a nadie, incluso se ha tomado en cuenta a los interinos y residentes. Se han contemplado a 18,500 empleados”, explicó la directora general del ISSS, Mónica Ayala Guerrero.
Esta dignificación del personal del ISSS siempre fue materia pendiente para los directores en administraciones anteriores, algunos de ellos señalados en casos de corrupción y ahora testigos criteriados en procesos de malversación de fondos, además de estar involucrados en el otorgamiento de contratos lesivos para los fondos aportados por los cotizantes.
El Gobierno de la República está comprometido con los trabajadores del ISSS y los derechohabientes, por lo que ha mejorado los procesos en beneficio de los pacientes y sus familiares, para que deje de ser esa institución burocrática que en Gobierno anteriores se utilizaba como caja chica de intereses políticos.