El Gobierno de la República condena el entorpecimiento que nuevamente impuso este día la Asamblea Legislativa al trabajo del personal de la Secretaría de Prensa y la Secretaría de Comunicaciones de la Presidencia que cubre la interpelación del ministro de la Defensa Nacional, René Merino Monroy.
A lo largo del año y durante diversas actividades a las cuales acuden funcionarios del Gobierno, el personal de seguridad y de comunicaciones del Órgano Legislativo, argumentando órdenes superiores, bloquea el trabajo de fotoperiodistas, camarógrafos y redactores de ambas Secretarías de la Presidencia, cuyo trabajo es documentar las intervenciones para darlas a conocer a través de las plataformas informativas oficiales.
Dicha actividad, claramente violatoria a la libertad de expresión e información, contrasta con la supuesta preocupación de los diputados por esos derechos, quienes incluso han formado una comisión para investigar supuestos ataques en contra de periodistas.
El jueves pasado, durante el informe de labores del primer año de Gobierno de los ministros de Gobernación, Educación y Vivienda, personal de comunicaciones de la Asamblea Legislativa se dedicó a perseguir, hostigar y tomar fotografías de personal de la Presidencia de la República.
Asimismo, el Gobierno desmiente las declaraciones trasnochadas de legisladores que de manera irresponsable acusan a personal de Comunicaciones y de Prensa de ser “troles”, luego de que quedara en evidencia en redes sociales que el jefe de fracción del PDC, Rodolfo Parker, recibiera información desde la Corte de Cuentas, según uno de sus asesores, cuando hay una auditoría en proceso al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
