El Gobierno del Presidente Nayib Bukele no permitirá un incremento al pasaje que pagan usuarios de autobuses y microbuses, tal y como lo han venido proponiendo los dirigentes de los principales gremios del transporte público de pasajeros en El Salvador.
Actualmente la tarifa autorizada por el Viceministerio de Transporte a cobrar en el servicio urbano es de 0.20 centavos de dólar en los autobuses y 0.25 centavos en los microbuses.
Para mantener esa tarifa a los usuarios, el Gobierno Central entrega mensualmente a los dueños de las unidades un subsidio de $400 por cada autobús, y $200 por microbús.
En mayo pasado, no obstante, el Gobierno únicamente autorizó subsidiar las empresas que se han quedado brindando el servicio para transportar al personal médico que está trabajando debido a la pandemia de COVID-19.
Los transportistas entregaron esta tarde al Gobierno una propuesta para poder operar cuando entre en vigor la fase 2 del Plan de Reapertura Económica. Los dueños de unidades han expresado que en las condiciones que les tocaría trabajar – unidades con pocos usuarios debido al distanciamiento social – no les resultaría rentable.
El ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, expresó días atrás que no es negociable, bajo ningún punto de vista, un incremento al pasaje, tampoco un aumento de la cuota de subsidio que entregan por cada unidad que sale a la calle a dar el servicio.
El Gobierno del Presidente Bukele promueve estrategias en beneficio de la población. Por tal razón es que fue suspendido el inicio de la fase 2 del Plan de Reapertura Económica para que los usuarios del transporte público no se expongan a un contagio masivo de COVID-19.