Cada alta médica extendida a pacientes del Hospital El Salvador es motivo de alegría para todo el personal del Hospital El Salvador porque significa haber cumplido el objetivo de salvar vidas. Las personas regresan a su familia curados de COVID-19, después de pasar uno de los episodios más difíciles de su vida.
Desde que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele inauguró la primera fase del hospital, el 21 de junio pasado, a esta fecha han dado el alta a 4,337 pacientes de COVID-19 con cuadros difíciles, pero gracias a Dios y los cuidos del equipo lograron vencer al virus.
Del total de pacientes recuperados 1,802 son mujeres y 2,535 hombres, de diferentes edades, creencia política, religión, posición social, todos fueron atendidos gratis en uno de los mejores centros especializados de Latinoamérica.
El Hospital El Salvador es un centro de salud público que desde el inicio del proyecto los opositores y detractores políticos del Gobierno intentaron, fallidamente, boicotear. En plena crisis sanitaria, los políticos sugirieron atender a los pacientes delicados “en galeras” o carpas de forma improvisada.
El Presidente de la República, sin embargo, no escuchó las voces opositoras que le pedían atender a la ligera un problema tan delicado como la salud de los salvadoreños, y giró la instrucción de construir el mejor hospital que se pudiera tener para pacientes críticos y graves.
En su discurso de inauguración de la primera fase de las instalaciones, el Mandatario dijo: “Es una gran obra para nuestro país y va a ser un legado para este Gobierno y va a ser un legado para las próximas generaciones”.
El Presidente siempre ha instruido a su gabinete de Gobierno para hacer las mejores obras en beneficio de los salvadoreños. El Hospital El Salvador está ayudando a recuperar pacientes y ahora con la tercera fase completada se ha adaptado el Megacentro de Vacunación al que acude la población para obtener la inmunización contra el virus.
El Salvador destaca en el mundo por el buen manejo sanitario que ha desarrollado durante la pandemia, protegiendo la vida de miles de salvadoreños.