Los esfuerzos que ha hecho el Gobierno del Presidente Nayib Bukele para cumplir con las prioridades y obligaciones del Estado ha permitido superar, de manera progresiva, los problemas que dejaron las gestiones anteriores.
En este contexto, la calificadora internacional de riesgo Moody’s decidió mantener en B3 la nota para el país, ya que hay un compromiso activo del Gobierno.
“Moody’s prevé que el Gobierno comenzará a consolidar sus finanzas en la segunda mitad de este año, con lo que se facilitará el acceso a financiamiento con (organismos) multilaterales para cubrir la mayor parte de la brecha de este año; a la vez, esto reducirá la posibilidad de un evento crediticio en los próximos dos años”, consignó la firma calificadora.
Las señales que se reciben desde el mercado internacional también confirman que hay avances positivos. Bloomberg anunció que los bonos salvadoreños van ganando terreno en el mercado de los grandes inversionistas. Además de que han subido de precio –porque hay mayor demanda–, el riesgo bajó más de 100 puntos básicos. Este es un indicador de la confianza que genera esta administración pública sobre honrar sus compromisos.
“Nos dejaron un país endeudado con un 70 % del PIB”, comentó el titular del Ministerio de Hacienda (MH), Alejandro Zelaya. Esa es una parte. Durante las administraciones anteriores, los exfuncionarios pusieron en marcha al menos tres fideicomisos que no funcionaron como se había prometido, sacrificaron la inversión en Salud y Educación, sometieron al país a la cadena de emisiones de bonos que se siguen pagando, mintieron al Fondo Monetario Internacional (FMI), llevaron a FONAVIPO a un impago de sus cuotas y, después, al mismo Gobierno Central hacia una situación de impago selectivo.
Con medidas concretas, el Presidente Bukele ha fortalecido el manejo de las finanzas. Es así como el país ha pagado todas sus cuotas, incluso las de las alcaldías; pero, además, continúa recibiendo del apoyo de los organismos multilaterales, más allá del bloqueo persistente y las maniobras fuera de ley desde la Asamblea Legislativa.
Ahora, el Gobierno espera ejecutar una segunda fase del Plan Antievasión, que ha permitido recuperar $221 millones. El ministro Zelaya detalló que incluirán a los entes supervisores de las profesiones de contadores y de auditores. También comienza a operar una nueva unidad de fiscalización.
“Con muchos menos recursos de los que ellos han tenido en gobiernos anteriores, logramos solventar las necesidades de nuestra gente. Hemos podido hacer un buen manejo de la emergencia”, dijo el ministro de Hacienda.
Para 2021, el Presidente Bukele continuará mejorando las condiciones de vida de los hogares e impulsando la prosperidad de las empresas, con el óptimo uso de los recursos.