El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ya comenzó a desembolsar los aportes requeridos para respaldar el aumento de la pensión mínima. Sin embargo, los diputados dentro del bloque opositor siguen usando esta prestación social como medida de presión para entregar más dinero a los alcaldes, cuando faltan pocos días para la campaña electoral.
En la sesión plenaria del 20 de enero, un grupo de diputados promovió la superación de tres vetos que aplicó el Presidente. Además, votaron a favor de un nuevo decreto que permite aumentar el porcentaje de FODES dirigido a gastos administrativos.
Uno de los vetos que fue superado está relacionado con el decreto 803, con el que los diputados intentan decidir de manera unilateral sobre la distribución de un préstamo que había otorgado el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por hasta $250 millones. Los legisladores buscan dar $125 millones a los alcaldes y destinar otros $125 millones para sostener el aumento de la pensión mínima.
Sobre esta maniobra legislativa, queda en evidencia que la prioridad de los partidos opositores siguen siendo los jefes edilicios y no la población en situación de vulnerabilidad. Primero, porque el veto se superó cuando los fondos para el aumento a la pensión ya se habían desembolsado; segundo, porque ese préstamo del BID dejó de estar disponible.
Las personas que califican para recibir la pensión de $304.17 han comenzado a recibirla, dependiendo del sistema en el que cotizaron y si están dentro de la categoría para ser beneficiarios.
Sobre el segundo punto, se pronunció el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya: “Esa operación (de préstamo) ya no existe” y no puede acceder a los $250 millones. Cuando se aprobó en primera vuelta, el 22 de junio, eran condiciones diferentes que han ido cambiando. A pesar de que el BID dio la oportunidad, los diputados se tardaron más de seis meses en darle trámite. “Han jugado con la relación con los organismos internacionales y, lo que más nos duele, han jugado con las necesidades de nuestra gente”, dijo el ministro Zelaya.
Otro de los vetos superados también tiene relación con un préstamo de hasta $50 millones facilitados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE). Los opositores en la Asamblea buscan darle todo esto a los alcaldes.
El Presidente Bukele ya había anunciado que se tomaron las medidas legales necesarias para que los préstamos aprobados, como el del BCIE, se utilicen para la inversión social que el Ejecutivo tiene preparada.