La Comisión de Hacienda de la Asamblea Legislativa sigue sin dar luz verde a cuatro préstamos internacionales que el Gobierno ha gestionado con la banca internacional para enfrentar la pandemia y llevar liquidez a las arcas estatales, y todo parece indicar que los legisladores se irán al receso agostino sin ratificar estos instrumentos financieros urgentes.
Desde ayer, la comisión no ha llegado a un acuerdo para aprobar estos préstamos en la sesión plenaria del miércoles, por lo que el proceso para que entren en vigencia se podría atrasar por dos semanas, lo que deja atado de manos al Gobierno para poder hacer frente a la pandemia y evitar más contagios y muertes por coronavirus.
El ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, pidió el lunes a la comisión que ratifique $600 millones con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) destinados a reducir los efectos del COVID-19 y cumplir con otras obligaciones, pero los legisladores no llegaron a ningún entendimiento ni aprobaron un dictamen favorable al respecto.
Entre el financiamiento hay $250 millones, que si no son ratificados antes del 5 de agosto se perderán, según lo estipulan los contratos con el BID. Este crédito va destinado para el “Programa de Fortalecimiento de la Política Pública y Gestión Fiscal para la Atención de la Crisis Sanitaria y Económica causada por el COVID-19 en El Salvador”.
Las bancadas de ARENA, FMLN y PDC son las más renuentes en dar su respaldo a los préstamos, que requieren de 56 votos para su ratificación y posterior inclusión en el plan de gastos.
El lunes, el ministro de Hacienda les dijo a los diputados que los empréstitos a ratificar son los mismos que ya aprobaron en primera vuelta, por lo que no hay motivo para que sean pospuestos. De los fondos, solo uno de $20 millones con el Banco Mundial está en la última etapa de aprobación, que es la de su incorporación al Presupuesto.