La incautación de armas consideradas de guerra por parte de la Policía Nacional Civil (PNC) va en aumento en lo que va de 2020. La confiscación es parte del trabajo operativo que ejecuta el personal policial con el Plan Control Territorial implementado por el Gobierno del Presidente Nayib Bukele.
En la ubicación de armas largas y automáticas hecha por la Policía entre el 1 de enero y el 15 de septiembre de este año, se encuentran 273 armas de guerra. La mayoría de estas son fusiles calibre 5.56 milímetros (mm) entre ellos M-16 y Galil. De ese tipo de calibre son 131 armas incautadas.
Entre esa requisa también se incluyen 32 ametralladoras, las cuales son consideradas armas de apoyo durante un enfrentamiento armado. En el país la mayoría de las armas de guerras son incautadas a diferentes grupos terroristas.
El departamento donde más se han localizado armas de guerra en este año es Santa Ana, seguido de Sonsonate y San Salvador.
Además de las armas de guerra, la Policía también ha ubicado 262 escopetas en lo que va de 2020. La ubicación de granadas industriales es un rubro en el que la Policía registra un incremento en lo que va de 2020. Este año han ubicado 38 explosivos, en 2019 reportaban 31. Es decir, ha habido un aumento de un 23% en la localización de granadas.
La incautación de armas y explosivos demuestra la operatividad policial. En cifras generales, la corporación policial reporta la requisa de 1,838 armas de fuego, entre las que se incluye pistolas, revólveres, y artesanales en 2020.
El Gabinete de Seguridad ha reiterado que la disminución en los índices de homicidios y otros delitos está relacionada con el trabajo de la Policía y la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) en coordinación con la Dirección General de Centros Penales y que no existe un pacto con los grupos terroristas como sucedió en los gobiernos anteriores.