Mientras la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) insiste, en un comunicado, que no hay apoyo a sectores económicos por los efectos que ha generado la pandemia de COVID-19 en su actividad productiva, el Gobierno del Presidente Nayib Bukele le recuerda a esta gremial que la responsabilidad de aprobar los recursos corresponde a la Asamblea Legislativa donde el binomio ARENA-FMLN continúa la estrategia de dilatar todo lo que propone el Órgano Ejecutivo, sin tomar en cuenta la situación que vive el país.
Por ello, el Gobierno le hace un llamado a la ANEP a que aporte soluciones a los problemas del país y a que también haga una exhortación a los diputados a que aborden con seriedad la pandemia y sus efectos económicos, ya que la mayoría de propuestas y anteproyectos llevan más de cuatro meses “traspapelados” en las comisiones legislativas o entre solicitudes de “más información” y débiles argumentos de falta de transparencia.
En este último punto la gremial asegura que el Órgano Ejecutivo “no da detalles de cómo se ha gastado el dinero público”. Sin embargo, desde Casa Presidencial se han emitido lineamientos para colaborar con las instituciones de control, como la Corte de Cuentas de la República (CCR) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en El Salvador (CICIES), a quienes se les ha entregado toda la información requerida para hacer las auditorías.
No obstante, es lamentable que la CCR en varios casos haya adelantado criterio y detallado, en entrevistas y espacios mediáticos, sobre auditorías en proceso, lo que incluso va en contra de su misma ley y sus normativas. Esto no lo ha tomado en cuenta ANEP en su planteamiento, como tampoco el compromiso gubernamental con la transparencia y la rendición de cuentas, además de una eficiente ejecución presupuestaria en temas como la modernización de la red hospitalaria, la entrega de paquetes alimentarios y otras políticas de apoyo a sectores vulnerables.
El Gobierno del Presidente Bukele también le advierte a la ANEP que, más allá de endeudamiento, el país tiene un problema de ingresos por los efectos de la pandemia en todos los sectores económicos, por lo que se vuelven urgentes las medidas de reactivación que entrampan los legisladores, además de un rol más responsable de diferentes actores del sector privado en el cumplimiento de sus obligaciones tributarias en beneficio de todos los salvadoreños.
En conclusión, el llamado del Gobierno a la ANEP es a evitar la manipulación, con un fin político-electoral, de las necesidades de El Salvador, por lo que reitera el llamado a la unidad y a que también los diputados jueguen su rol, aprobando créditos importantes como los $250 millones del BID y a asignar $53 millones pendientes para la reactivación económica, que es importante por la estela que la dejado el COVID-19 a nivel nacional.