La tasa de homicidios proyectada para 2020, según las estadísticas de la Policía Nacional Civil (PNC), es de 23 por cada 100,000 habitantes.
La reducción en los índices de asesinatos y otros delitos es resultado del Plan Control Territorial implementado por el Gobierno del Presidente Nayib Bukele.
Con esa proyección para este año, la cantidad de asesinatos, según datos oficiales de la Policía, bajaría de 36 a 23 por cada 100,000 habitantes.
En los gobiernos anteriores, El Salvador llegó a tener por varios años el mayor número de homicidios en Centroamérica. En 2015, las autoridades confirmaban una tasa de 103 homicidios por cada 100,000 habitantes. En 2016 fue de 81, y en 2017 de 60.
Durante la implementación de la estrategia de seguridad impulsada por el Gobierno del Presidente Bukele, los salvadoreños han sido testigos de la disminución de los índices delictivos.
El control de los territorios por parte de la Policía ha permitido la baja de un 54.1% en la cifra de los homicidios registrados entre el 1 de enero y el 15 de septiembre anterior.
La operatividad de la Policía y de la Fuerza Armada de El Salvador y el orden y control aplicado al interior de los Centros Penales han sido determinantes en la disminución en los índices de criminalidad durante la actual gestión presidencial.
A pesar de los resultados exitosos del Plan Control Territorial, la Asamblea Legislativa continúa sin aprobar los fondos para la implementación de las fases 2 y 3 de la estrategia de seguridad. Para ello se necesita invertir $575.2 millones, de los cuales $200 millones serían financiados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BID), divididos en dos préstamos: uno por $91 millones para la fase 2, y otro por $109 millones para la fase 3.