El ritmo de contagios de COVID-19 llegó hoy al punto más bajo desde que la curva de la pandemia inició el descenso el pasado 9 de agosto. Solo ayer fueron confirmados 75 nuevos casos, de 2,500 pruebas realizadas para diagnosticar la enfermedad.
La tendencia a la baja del número de los casos confirmados por día se mantiene, 24 días después de la reapertura de la economía en el país.
El ministro de Salud, Francisco Alabi, ha explicado que entre las causas de la desaceleración de los contagios están las estrategias preventivas que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele puso en vigor desde el inicio de la pandemia, además a la actitud de la mayoría de la población al acatar los protocolos de bioseguridad.
A diferencia de otros países que abrieron sus economías y al cabo de unas semanas tuvieron que volver a cerrar por una segunda ola de contagios, en El Salvador ha quedado demostrada la disciplina de los ciudadanos.
El próximo 19 de septiembre se inicia una fase más del plan de reapertura voluntario con el que se reabren los parques nacionales y aeropuertos del país, se espera que la población continúe aplicando las medidas higiénicas de prevención para evitar los contagios, sobre todo a esta fecha en que los índices de la pandemia prácticamente son controlables.
Para el Presidente de la República, Nayib Bukele, es importante que la población no baje la guardia con el uso del cubreboca, lavado frecuente de las manos con jabón y agua, alcohol en gel y la más importante de todas: guardar el distanciamiento social (físico), de esta forma se evita los contagios.
El próximo 18 de septiembre se cumplen seis meses desde la detección del primer caso confirmado de la enfermedad en el país, un hombre que entró por un punto ciego al país procedente de Guatemala. Fue detectado en el municipio de Metapán, en el departamento de Santa Ana.
A la fecha el país reporta 27,163 casos confirmados, de estos 19,960 son recuperados, es decir que lograron vencer el virus, 6,407 están activos y 796 fallecidos.