El Gobierno del Presidente Nayib Bukele está afinando los últimos detalles del Presupuesto General para el ejercicio fiscal 2021, donde una de las principales apuestas es fortalecer la recuperación económica por los efectos de la pandemia de COVID-19, a pesar de que se ha dado una importante caída de los ingresos, algo que no detendrá la aspiración de esta administración de lograr lo mejor para el país en temas como la inversión social, infraestructura y todos los servicios a favor de los salvadoreños.
El Ministerio de Hacienda es la entidad gubernamental encargada de elaborar el anteproyecto y, según la Constitución de la República, la fecha límite para entregar el documento a la Asamblea Legislativa es el próximo 30 de septiembre, para que inicie su discusión en el la Comisión de Hacienda y Especial del Presupuesto.
Al respecto el Gobierno de la República espera una discusión y un diálogo técnico para lograr el bienestar nacional y que no prevalezcan los debates estériles o político-electorales, algo que, en el contexto de la pandemia de COVID-19, ha demostrado que no genera nada en beneficio del país y que confirma la tónica en la que la Asamblea Legislativa aborda los problemas nacionales, en clara desvinculación con la sociedad y el Órgano Ejecutivo.
Luego de más de seis meses con actividad económica limitada en el país, a causa de la emergencia por COVID-19, los ingresos tributarios sufrieron una caída de casi $700 millones en impuestos como la Renta, IVA y Pago a Cuenta y otros específicos, según datos del Ministerio de Hacienda.
Por ello, es importante que exista un acuerdo, entre las fuerzas políticas y el Gobierno, para superar este impase, y que el presupuesto se pueda aprobar antes de que finalice el año para dar certidumbre al país, tanto a los mercados internacionales como a los inversionistas, que han anunciado que seguirán confiando en el país y en la gestión del Presidente Bukele para continuar sus negocios y operaciones, pese a la pandemia.
Cabe destacar que aún hay asignaciones presupuestarias pendientes para el ejercicio fiscal vigente, como otros $250 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para el fideicomiso de reactivación de empresas, más $53 millones pendientes de asignación, luego de que los diputados cambiaran, la semana pasada, el destino de varias asignaciones de otro crédito de similar cantidad del mismo organismo multilateral.
El Órgano Ejecutivo hace un nuevo llamado a la Asamblea Legislativa a que se despoje de cualquier interés político-electoral y busque lo mejor para la nación, recordándole que el presupuesto es una de las herramientas económicas más importantes para darle al país certeza, claridad y capacidad de cumplir con todos sus objetivos como mejores hospitales, escuelas, carreteras, inversiones estratégicas y proyectos que apunten al desarrollo y la modernidad de El Salvador.