El Presidente de la República, Nayib Bukele, confirmó la reapertura de las actividades económicas a partir del próximo martes 16 de junio, la cual, aseguró, se hará de forma ordenada, pese a la obstaculización que han significado las recientes decisiones del Órgano Judicial y la negativa del Órgano Legislativo a consensuar una ley que la norme.
“Tenemos que enfrentar esta reapertura económica y lo vamos a hacer de la manera más inteligente”, anunció el jefe de Estado en un mensaje a la nación transmitido por cadena nacional de radio y televisión el sábado en la noche.
El mandatario aseguró que tras la resolución de la Sala de lo Constitucional en la que declaró inconstitucional toda la legislación que había sido emitida para regular el estado de emergencia y la cuarentena, el Gobierno ha tenido que acudir a la única herramienta a su disposición: la publicación de protocolos sanitarios por parte del Ministerio de Salud para normar la reapertura.
“Nos quitaron el poder de convocar a la Asamblea, nos quitaron el poder de decretar régimen de excepción, aunque está textual en la Constitución; nos quitaron el poder de declarar estado de emergencia, aunque está textual en el articulo 24 de la Ley de Protección Civil; y nos quitaron el poder de hacer decretos ejecutivos con base al Código de Salud”, dijo el gobernante.
“Ahora solo nos queda un poder, ojalá no lo declaren inconstitucional también: vamos a tratar de aplicar los protocolos máximos que podemos, negociados con la misma empresa privada, para bajar esos contagios al mínimo sabiendo que van a haber más contagios”, explicó.
El Presidente también reveló que la Ley de Regulación para el Aislamiento, Cuarentena, Observación y Vigilancia por COVID-19, una de las leyes que la Sala de lo Constitucional declaró inconstitucional, había contado antes con el aval de los mismos magistrados de esa instancia.
El mandatario comentó que dicho aval se dio en una reunión presidida por él y en la que participaron los cinco magistrados, el fiscal general de la República, el jefe de la fracción legislativa de ARENA, el expresidente de la ANEP y el embajador de los Estados Unidos.
“Estuvimos conversando y llegamos al acuerdo de la ley de cuarentena, porque ellos nos dijeron en esa reunión de que necesitábamos una legislación que regular la cuarentena, de ahí llegamos al acuerdo de hacer la ley”, detalló el dignatario.
“Ahí nosotros nos dimos cuenta que con estas personas no se puede negociar, no tienen palabra, son personas que simple y sencillamente están para bloquear y sabotear al Gobierno y, lo peor, al pueblo salvadoreño”, lamentó.
El gobernante también anunció que vetaría el Decreto Legislativo 661, que contiene la Ley Especial de Emergencia por la Pandemia, por considerarlos inconstitucional.
“Viola el derecho a la salud y la vida del pueblo salvadoreño y además viola el principio de separación de poderes, establecido en el artículo 86 de la Constitución, al invadir la competencia que tiene el Ministerio de Salud como la máxima autoridad para implementar políticas, medidas y acciones en la prevención, contención y atención de cualquier crisis sanitaria, incluyendo la pandemia del COVID-19”, expresó.
Indicó que dicho decreto -con el cual la Asamblea Legislativa pretendía otorgar un estado de emergencia al Gobierno para atender la pandemia- plantea una vía para la reapertura de golpe de la economía, lo cual, razonó, contribuiría a elevar más el contagio por la enfermedad.
El gobernante manifestó que la reapertura económica se realizaría en cinco fases, la primera con un plazo de 21 días y las siguientes con una duración de 15 días cada una.
La primera fase dará inicio el próxima martes 16 de junio, y en esta abrirán sectores importantes para la economía, como el sector textil y confección, construcción y servicios médicos que no necesariamente sean emergencias, y talleres, entre otros.
En la segunda fase, que iniciará el 7 de julio, abrirán las industrias creativas, del calzado, cosméticos, plástico, papel y cartón, así como el transporte público, bajo los lineamientos que serán dictados por el Ministerio de Salud.
En la fase 3, a partir del 22 de julio, abrirán el comercio al menor y por mayor, las iglesias y lugares de culto, entre otras.
En la fase 4, a partir del 6 de agosto, se restablecerá el turismo interno e internacional, así como las operaciones en el Aeropuerto Internacional. En una quinta fase, que iniciaría el 21 de agosto, se reanudarán las actividades de carácter social.