La recolección de impuestos, junto a los fondos externos, ahora sí se utilizan para multiplicar las obras y mejorar los servicios en beneficio de los salvadoreños. El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ha puesto en marcha las estrategias para mejorar la utilización de los recursos públicos y dar pasos hacia el equilibrio del fisco.
Así, el Plan Antievasión ha logrado identificar y recuperar $345.9 millones desde que comenzó la implementación en octubre de 2019. Hay otros $71 millones con potencial de recuperación en avisos que el Gobierno presentó a la Fiscalía General de la República.
En este mismo contexto, el Ministerio de Hacienda (MH) trabaja en lograr un balance para amortiguar el incremento de la deuda pública. Para ello tiene listas las operaciones de préstamo que servirán para honrar deuda cara y cambiarla por una de mejores condiciones de pago. La nueva Asamblea Legislativa tendrá un papel importante para lograr este objetivo.
En la última semana de abril termina el período establecido por ley para recibir las declaraciones del Impuesto Sobre la Renta (ISR). En comparación con 2020, los ingresos obtenidos a través de las declaraciones han incrementado en $95 millones. En el caso del IVA, el primer trimestre de 2021 dejó un aumento de $22.5 millones frente al mismo período del año anterior, en cuanto a declaraciones.
Todos estos aportes de los contribuyentes luego se convierten en más hospitales, vacunas, computadoras para estudiantes, libros de apoyo escolar, mayor presencia policial, acceso a vivienda social y obras viales de carácter estratégico. Frente a estas necesidades, el Gobierno sigue activo en buscar cómo hacer una recolección de tributos más eficiente y responsabilizar a quienes no quieren pagarlos.
“La salud, la educación, la seguridad que nos faltan son esos fondos que se llevan los evasores”, dijo Alejandro Zelaya, titular del MH. “No perseguimos empresarios: perseguimos evasores”, enfatizó. Este programa para recuperar los fondos que pertenecen al pueblo ha llegado a ser un referente en América Latina.
De hecho, el Gobierno ha trabajado en que las declaraciones del ISR puedan hacerse con rapidez, a través de medios tecnológicos y sin tener que gastar en papel y con un alto grado de automatización. Pronto se emprenderán reformas para que evitar que unos pocos auditores afecten al resto del gremio con informes que protegen a estos evasores.
Como acciones complementarias, el país avanza en obtener el respaldo de organismos financieros multilaterales. El histórico préstamo de $600 millones del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) es un voto de confianza a los esfuerzos que ha hecho el Gobierno para impulsar la recuperación económica.
El presidente del BCIE, Dante Mossi, externó que hay otros créditos en análisis para El Salvador, que destaca por su respaldo financiero a las mipymes.
También hay operaciones financieras con organismos multilaterales que gestiona el Gobierno para enfrentar la carga de la deuda de LETES y CETES, que son los instrumentos que originan la deuda de corto plazo. El propósito es cumplir con este compromiso y obtener mejores condiciones de pago. Es importante recordar que, a pesar de la pandemia, el país honró todas sus obligaciones y las mantuvo al día.
Estas iniciativas ayudan al equilibrio de las finanzas públicas, después de que los gobiernos anteriores solo agravaron el problema.
“Si bien es cierto que hemos necesitado financiamiento, como todos los países del mundo, las obras y servicios que se le ha dado a la población se ven”, subrayó el ministro de Hacienda. “Los impuestos y el financiamiento que hemos logrado están siendo bien usadas”, concluyó el funcionario.