El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ha logrado acercar el servicio de agua potable a la población, en un esfuerzo que se implementa a diario, a través de una ruta de abastecimiento de agua potable que mantiene en el territorio la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA).
Durante décadas, las zonas más afectadas no obtuvieron respuesta de ninguna administración, pero ahora, gracias a la visión del Presidente Bukele, se ha logrado llegar a comunidades que históricamente demandaron un servicio de agua eficiente.
Para el Gobierno es prioridad regular el suministro del recurso hídrico para la población, por lo que no ha detenido los procesos de rehabilitación de pozos, ni de mejora de los sistemas de distribución, los cuales se encontraban en estado deplorable, debido a la falta de mantenimiento.
El presidente de ANDA, Rubén Alemán, aseguró que la Planta Potabilizadora Las Pavas, ubicada en San Pablo Tacachico, en La Libertad, lleva un 75 % de avance y, con la instalación de los nuevos motores, se espera que esta opere al 100 % en poco tiempo. “Esperamos decir en los próximos meses: misión cumplida”, afirmó el funcionario.
El Gobierno, a través de ANDA, le apuesta al abastecimiento de agua en las zonas olvidadas por las administraciones anteriores, por eso, dirige un Plan Nacional de Agua con el que están superando los problemas más críticos, garantizando una distribución más equitativa del recurso.
A diario, las cuadrillas de la autónoma se desplazan al territorio, a resolver las necesidades más inmediatas de la población. La ANDA se encuentra monitoreando constantemente las plantas de bombeo y rebombeo para cumplir con la ruta de abastecimiento programada.
Desde que inició la gestión del Gobierno del Presidente Bukele, los usuarios de ANDA han presenciado la transformación de la institución, que en anteriores gestiones no brindó ningún beneficio a los usuarios, pero ahora, la institución está trabajando de forma transparente para mejorar las problemáticas en el suministro.
Con la conformación de la nueva Asamblea Legislativa, se espera saldar una deuda histórica, como es la Ley General de Aguas, que los diputados opositores que están por abandonar el órgano legislativo mostraron total desinterés por el bienestar de los salvadoreños.