La reducción de la cifra de asesinatos es evidente en todo el territorio salvadoreño, gracias a la implementación del Plan Control Territorial impulsado por el Gobierno del Presidente Nayib Bukele.
Las estadísticas de la Policía Nacional Civil (PNC) revelan que de los 262 municipios que conforman El Salvador, en 102 la cantidad de agresiones armadas con saldos fatales oscila entre 1 y 3 en lo que va de 2020.
La Paz, Usulután, San Miguel y Cuscatlán son los departamentos donde se ubican 40 municipios con una baja en el índice de criminalidad.
Esos departamentos en las pasadas gestiones presidenciales tenían graves problemas de inseguridad.
Muestra de esa reducción es la que se contabiliza en el departamento de La Paz. De los 22 municipios que lo conforman, en 10 no se han cometido homicidios; en otras 10 localidades de ese mismo departamento se contabilizan entre 1 y 3 crímenes en lo que va de 2020; y en solo en dos jurisdicciones de La Paz se han perpetrado entre 4 y 6 muertes violentas.
Similar situación ha sucedido en el departamento de Usulután. De los 23 municipios que lo integran, en ocho no han sucedido muertes a causa de la violencia, 10 tienen entre 1 y 3 crímenes, y otros 5 con más de 4 homicidios.
También en el departamento de Cuscatlán, de los 16 municipios, en tres no se reportan hechos de violencia, en 10 contabiliza entre 1 y 3 crímenes. En las otras tres localidades suman más de 4 asesinatos.
El Plan Control Territorial es la estrategia de seguridad del Gobierno del Presidente Bukele, implementada por la Policía, Fuerza Armada de El Salvador y Centros Penales, con el propósito de acceder a los territorios de manera conjunta y articulada con otras instituciones gubernamentales, para una verdadera recuperación de los espacios controlados por grupos criminales.